«Por tu salud, muévete más», «Por tu salud, limita el consumo de sal, azúcar y grasa»… Todos hemos oído alguna vez estos mensajes en la televisión. Y aunque el Estado se preocupe por tu bienestar, no es el único.
Cuando pides una hipoteca, las aseguradoras tienen interés en que goces de buena salud: eso reduce los riesgos, y a cambio pueden ofrecerte tarifas más competitivas. ¡Todos ganan! Aquí van 3 consejos clave para cuidar tu salud… y pagar menos por tu seguro.
¿Seguro sin cuestionario médico? No siempre en España
A diferencia de Francia, donde la Ley Lemoine eliminó en 2022 el cuestionario médico en algunos casos, en España no existe hoy ninguna ley equivalente. Las aseguradoras pueden seguir solicitando datos de salud si lo consideran necesario, sobre todo para préstamos grandes o a largo plazo.
Lo que sí es obligatorio, según el artículo 10 de la Ley del Contrato de Seguro (Ley 50/1980), es que declares con buena fe cualquier enfermedad o circunstancia médica que conozcas y que pueda influir en el riesgo asegurado.
✅ Algunos aseguradores, especialmente digitales, han simplificado este proceso, y si eres una persona joven, no fumadora y con buen historial, es posible que no te pidan cuestionario. Pero no está garantizado por ley.
Ahora sí, pasemos a nuestros consejos de salud… ¡que también te pueden hacer ahorrar!
¿Comer menos… o comer mejor?
La alimentación es clave para la salud y cada vez más estudios confirman el papel esencial de algunos nutrientes, como los antioxidantes, en la prevención de enfermedades: ayudan a retrasar el envejecimiento, reducir el riesgo de cáncer o enfermedades cardiovasculares, y mejorar el colesterol.
¿Dónde encontrarlos? En frutas y verduras, pescado, mariscos, té, especias… ¡y hasta en el chocolate negro!
Evita alimentos ultraprocesados, ricos en sal, azúcares o grasas industriales (¡esos con muchos “E” en la etiqueta!). Comer bien no solo sirve para mantener la línea: es una inversión a largo plazo en tu “capital salud”.
📌 En España, la obesidad afecta a más del 16% de la población adulta (INE, 2024). Mejorar la alimentación puede reducir riesgos… y mejorar tu perfil de riesgo para el seguro.
Mantén la calma
Respira profundo… y relájate. El estrés crónico es uno de los grandes enemigos silenciosos. En España, según el Ministerio de Sanidad (2023), más del 25% de los adultos experimentan niveles elevados de estrés o ansiedad.
Aunque es un mecanismo natural útil en situaciones de peligro, cuando se vuelve crónico puede causar hipertensión, diabetes tipo 2, enfermedades del corazón o depresión.
👉 ¿La solución? Hacer algo que disfrutes a diario: caminar, ver amigos, practicar yoga o bailar flamenco si hace falta. ¡Lo importante es que te relajes!
¿Y el deporte? Según la Universidad de Valencia (2024), hacer ejercicio regularmente reduce los niveles de cortisol, la hormona del estrés, y mejora el bienestar general. Además… ¡liberas endorfinas!
Tranquilo, tu aseguradora no te va a pedir que rellenes una escala de estrés. Pero cuanto mejor estés, mejores condiciones podrás obtener.
Duerme como un lirón
Dormir bien no es perder el tiempo. ¡Es invertir en longevidad! Un estudio del Hospital Clínic de Barcelona (2024) concluyó que dormir menos de 6 horas por noche aumenta un 70% el riesgo de enfermedad cardiovascular.
El tiempo recomendado de sueño es:
-
14-17 años: entre 8 y 10 horas
-
18-64 años: entre 7 y 9 horas
-
65 años o más: 7-8 horas
Cada cuerpo es distinto: algunos con 6-7 horas rinden al 100%, otros necesitan más. Escucha a tu cuerpo.
📌 Aunque el seguro hipotecario no pregunta por tus hábitos de sueño, tener un buen descanso ayuda a evitar enfermedades que podrían afectar tu cobertura en el futuro.
¿Y si pudieras financiar tu salud… ahorrando en tu seguro?
Si estás pensando en contratar un préstamo hipotecario en España, la Ley 5/2019 te permite elegir libremente tu aseguradora, y no estás obligado a aceptar el seguro que te ofrece el banco.
Esta competencia entre aseguradoras ha hecho que los precios bajen. Y si eliges una opción externa, más digital e independiente como Assurly, podrías ahorrar varios miles de euros a lo largo de tu préstamo.
🔄 ¿Ya tienes un seguro? No pasa nada: puedes cambiarlo. Aunque en España no existe aún una “ley Lemoine”, muchos contratos permiten modificaciones con 30 días de antelación a la renovación anual.