Empecemos por el principio… para entender bien de qué hablamos, es esencial hacer un pequeño recordatorio sobre la utilidad del seguro de préstamo estudiantil.
Este seguro garantiza el buen reembolso, a su debido tiempo y cada mes, de tu préstamo estudiantil en caso de problema de salud, como un fallecimiento, una invalidez o una incapacidad… que te impida pagar.
Esto evita el sobreendeudamiento y te permite dormir tranquilo. No es obligatorio legalmente, pero suele ser exigido por el organismo prestatario en caso de impago, y también tranquiliza a tus familiares que actúan como garantes del préstamo.
💡 En resumen: el seguro de préstamo estudiantil está sujeto a la misma normativa que el seguro de crédito al consumo.
El coste del seguro de préstamo estudiantil depende del importe y la duración del préstamo, de tu estado de salud y de los tipos aplicados. En el caso de los estudiantes, suele ser más ventajoso negociar este coste según la aseguradora.
Puede representar hasta un 30 % del coste total del préstamo. Por eso es indispensable comparar las ofertas antes de suscribir tu contrato, ya sea mediante un comparador o un simulador.